Gozar del hijo – Emmanuelle Borgnis Desbordes

©Reddman Frédéric : www.instagram.com/frederic_reddmann/

Las intervenciones de la tecnología en lo vivo no dejan de producir en lo contemporáneo “disrupciones cada vez más numerosas y sorprendentes en los campos de la procreación, género y filiación” [1]. El 3 y el 4 de julio del 2021, el congreso PIPOL abordará las posibilidades e impasses del deseo del querer un hijo en relación directa con el gran desorden en las estructuras tradicionales de la experiencia humana desde “la evaporación del padre”, la “puesta en el zenit del objeto” y la libre circulación de “los Unos solos” [2].

Si los psicoanalistas tienen que unirse a la esfera de su época [3], ellos tienen que recibir las nuevas modalidades del goce de todos estos “solitarios” [4] que no son carentes de invención para emparejar sus seres y sus cuerpos en un destino común. El niño puede formar parte del programa de “hacer familia”, dando así una filiación de circunstancias.

Como en una posible disyunción entre sexualidad y procreación, asistimos, junto con los avances científicos y las técnicas de asistencia y procreación, a una disposición entre la procreación y la gestación, y también entre la genética y la filiación.  Entramos en el campo de todos los posibles que oculta toda contingencia. Por lo tanto, “al no constatarse más que contingencia en la relación entre los sexos, es que podemos inferir que no hay necesidad en acción” [5].

La ciencia permite y promete apareamientos de goces múltiples en materia de procreación. Si bien no podemos negar los aportes de la ciencia – el impulso ofrecido a numerosos proyectos de niños hasta antes imposibles – nosotros tenemos que interrogarnos sobre el deseo de querer un hijo cuando depende solamente de un “querer”. Más allá del niño en sí – el niño soñado, idealizado o fantaseado – nuevas cuestiones juegan la partición, relacionadas con nuevos posibles y más allá de todas las normas establecidas hasta entonces. En la época de “los unos disjuntos y dispersos” [6], el niño viene a encarnar nuevas funciones: dar un nuevo horizonte para mantener unidos a los seres – seres decididos a garantizar eso que hoy es comúnmente admitido de ser llamado nuevas familias – dar un soporte a un nuevo proyecto de filiación – sin importar las coordenadas – y finalmente, apoyar el proyecto sobre una legislación que se volvió la garantía existencial del montaje.

«Este recurso creciente al reconocimiento por la ley, ahí donde falta el reconocimiento simbólico, nos conduce a un mundo de normas dislocadas de un operador deseante encarnado «[7]. “Querer un hijo” es la versión contemporánea de un deseo de hijo “completamente vestido de un querer gozar particular”, aquel de “gozar del hijo” [8]. Si las posibilidades de este querer son múltiples, el programa de goce puede ser de las más feroces. Si cada-Uno escoge hacer pareja – o se aisla en una pareja madre-hijo – hoy en día puede comprometerse con la fabricación de un hijo. Si la época es la era de todos los posibles – a pesar de un senado que recientemente frena su oficialización [9] – una voluntad a veces feroz influye en las ganas de recuperar su objeto, es decir, el hijo.

Este querer se separa del deseo, un deseo que Lacan significa en estas palabras: “el deseo se esboza en el margen, ahí donde la demanda se deshace de la necesidad” [10]. La clínica psicoanalítica no deja de atestiguar frustraciones siempre crecientes de cada-Uno cuando el proyecto no llega a su fin – o cuando se realiza, pero no corresponde a las expectativas. “El hijo proyectado por estas técnicas se convirtió no solamente en un objeto de deseo, sino también aquel de una demanda admisible en derecho ante las instancias médicas cuando el deseo se encuentra entrabado por la naturaleza. Esta nueva configuración levanta un velo sobre aquello que llamamos el deseo de querer un niño, es la forma con la que éste se encuentra afectado por los progresos científicos más también por los avances societales” [11].

«Querer un niño confina a la reivindicación de obtener del mercado un producto disponible gracias a la ciencia” [12], reivindicación que se escapa a las coordenadas de la demanda y del deseo. “Si el psicoanálisis no puede ser un instrumento del conservadurismo social […], tampoco puede suscribir a todas las aberraciones del deseo” [13].  Así, “la forma en la que se combina el deseo, el goce y el amor es muy especial para cada uno y depende del azar [¡de la contingencia!] y sobre este punto, concerniente a la relación sexual en la especie humana, la ciencia debe declararse perdedora… entre hombres y mujeres la relación sexual no está programada” [14].

 

Traducción: A. Manzanaré

Relectura: Wendy Vives Leiva

Fotografía: ©Reddman Frédéric: www.instagram.com/frederic_reddmann/

 

[1] Ansermet F., Prédire l’enfant, Paris, PUF, 2019, p. 10.

[2] Miller J.-A., « L’orientation lacanienne. L’Un-tout-seul » (2010-2011), enseignement prononcé dans le cadre du département de psychanalyse de l’université de Paris VIII, inédit.

[3] Miller J.-A. « Le réel au XXIème siècle – IXè Congrès de l’AMP », La Cause du désir, n°82, Octobre 2012, p. 90.

[4] Quignard P, Sur l’idée d’une communauté de solitaires, Paris, Seuil, 2015.

[5] Miller J.-A., (3o janvier 2oo8) « L’orientation lacanienne. Nullibiété. Tout le monde est fou » (2007-2008) enseignement prononcé dans le cadre du département de psychanalyse de l’université de Paris VIII, cours du 30 janvier 2008, inédit.

[6] Brousse M.-H. « Un néologisme d’actualité : la parentalité », La Cause freudienne, n°60, 2005, p. 123.

[7] Holvoet D., « Présentation du Congrès PIPOL10 .  ¿Querer un hijo? Deseo de familia y clínica de las filiaciones», disponible en https://pipol10.pipolcongres.eu/es/presentacion/

[8] Ibid.

[9] https://www.vie-publique.fr/loi/268659-loi-bioethique-pma

[10] Lacan J., « Subversion du sujet et dialectique du désir dans l’inconscient freudien » [1957] in Écrits, Paris, Seuil, coll. Champ Freudien, 1966, p.814.

[11] Laurent D., « Comment produire des enfants Bio », préface, in Vacher-Vitasse C., Enigmes du corps féminin, Nîmes, Ed. Champ Social, 2018, p. 16-17.

[12] Holvoet D., op. cit.

[13] Laurent D., op. cit.

[14] Miller J.-A., « Histoires de psychanalyse. L’invention du partenaire » Intervention sur France Culture du 16 juin 2005.